Y un para qué, para qué?
que llevan en sus trinos los pájaros
esta mañana vera-primavera
en que por las profundas cuevas de mi ánimo
circula el viento de la tierna esperanza.
Esperando sin paraqués
sin teatrales Godots
sin desalientos desalentados
tan sólo desaliento
de cuando el amor hace espina
de la rosa.
Esperando tu llegada
al laberinto de pasillos
que recorres cada día
en apendice sonambúlico
uniendo el camino que separa
tu lecho de mi esperanza.
Esperando que tu rostro
me señale el parte meterológico
de la jornada
Hoy esta blando y aterciopelado
te encuentras bien dormida o bien soñada
Tus ojos achinados me hablan
de noches de Junio,
parras encaladas
y niños que juegan
al corro de tu alma.
Suso Díaz Revisión 2007